El pasado mes de noviembre personas del área de ECOLOGISMO de la asociación se reunieron con el técnico municipal de Espacios Verdes (Medio Ambiente)

El objeto de la reunión era doble: por un lado, tratar de despejar algunas dudas sobre lo que entendemos una gestión municipal insuficiente y/o poco transparente en ámbito tan esencial como es el Medio Ambiente y, por otro, actualizar las previsiones gestoras que en esta materia tiene el Ayuntamiento en proyecto a corto plazo.

La reunión tuvo lugar en el centro municipal de El Cantizal, un edificio ejemplar en eficiencia energética en el que a pesar de haber resultado un rotundo éxito (*) como prueba piloto en el aprovechamiento directo de las energías renovables (termosolar) no ha sido emulado en otros edificios municipales, nuevos o antiguos, quedando como evidencia empírica del discutible compromiso del Ayuntamiento en la promoción de las energías limpias.

El encuentro fue provechoso por la buena disposición informativa del técnico municipal, que en ningún momento escatimó tiempo ni detalle sobre las cuestiones que le planteamos o nos informaba. Los que se relacionan fueron los puntos de interés a destacar:

• La limitación de los recursos humanos disponibles, los cuales resultan muy ajustados para afrontar con capacidad y eficacia los retos ambientales que objetivamente se perfilan.
• La buena disposición inicial del actual concejal de Medio Ambiente sobre la colaboración del ayuntamiento con el tejido vecinal en la programación de actividades o eventos referidos al cuidado medioambiental y su concienciación. Para El Pueblo Que Queremos se trata sin duda de un apunte muy relevante y prometedor que muy pronto pondremos a prueba, en la confianza de que se derive una relación positiva.
• Respecto al asunto de enorme interés para la asociación como son los HUERTOS URBANOS nos “confirma” que se ultima el proyecto para hacerlos -por fin- realidad, aprovechando fondos FEDER y siguiendo el modelo de los implantados en BOADILLA. Se pretende que a primeros de 2020 se haga efectiva su convocatoria. El espacio elegido y reservado es la antigua finca de la TALAVERONA (junto al colegio GREDOS).
• Aprovechando este gran espacio reservado (23.000 m2) el proyecto que se estudia con bastantes visos de hacerse realidad contempla, junto a los HHUU: Un Centro de Interpretación “Aula de Naturaleza; un Área de recuperación de especies vegetales; un Vivero municipal.
• Otro tema de oportunidad para ampliar el pulmón verde en Las Rozas son las campañas de REFORESTACIÓN. El técnico coincide en que es una buena forma de colaborar ciudadanía y ayuntamiento. De hecho nos informa de algún proyecto en marcha. La idea es reparar un proyecto fundado y presentarlo a la Concejalía para su valoración: el Ayuntamiento pondría el espacio y la asociación el trabajo.
• Hablamos de la oportunidad de presentar un proyecto que actualice y mejore la configuración de los SENDEROS VERDES MUNICIPALES, como la mejor forma de conocer y disfrutar nuestro pueblo, y hacerlo de una doble forma: implementar/arreglar los existentes ya referenciados para hacerlos atractivos y útiles y proponer otros nuevos.
• El único punto en el que se mostró poco concluyente fue al preguntarle sobre el contenido y trabajo desplegado por el órgano creado “ad hoc” dentro del Programa “Las Rozas por el Clima”, la Oficina Municipal para el Cambio Climático (OMCC). La impresión recibida confirmaba lo que se deduce de la total ausencia de información que en la web municipal existe sobre órgano tan presuntamente capital para la lucha contra el Cambio climático en Las Rozas.
• Por último se habló de la, en su momento, alardeada ESTRATEGIA LOCAL contra el CAMBIO CLIMÁTICO (ELCC). Un programa plurianual, 2014 a 2019, lleno de promesas del que nos esbozó ciertos avances concretos, pero que, como expusimos, la transparencia exige que se acrediten a través de un primer informe de seguimiento, del trienio 2014-15-16, aunque sea publicado con tres años de retraso. Al parecer es algo inminente. Veremos.

En conclusión, se apreció una buena disposición del técnico municipal, lo que es siempre de agradecer, pero acompañada de una latente limitación funcional que distancia las mejores intenciones demostradas, amplias de miras al menos en su calidad técnica, con respecto a su potencial plasmación práctica, mucho más reducida, a veces puramente testimonial, asociada a una voluntad política.

Desde la ciudadanía nos corresponde presionar, con propuestas y críticas constructivas, a que esa distancia se acorte y que la responsabilidad para mitigar un cambio climático muy real sea plena y eficaz.

(*) La inversión realizada en la instalación de paneles solares ha sido ya amortizada -en 8 años-, obteniendo el Ayuntamiento ciertos ingresos a cuenta del volcado de energía en la red eléctrica.